A partir de las conclusiones de esta jornada se creará una hoja de ruta en el último trimestre de este año que pormenorice estrategias y la planificación de inversiones para que las oportunidades detectadas generen nuevas economías y riqueza en la comarca.
El salón de actos de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Oriental-Axarquía en Torre del Mar acogió este viernes el cuarto y último encuentro comarcal de la Diputación de Málaga del estudio ‘BioAction Social Málaga‘ para el abordaje de la bioeconomía circular contra el despoblamiento en la comarca.
Han asistido la vicepresidenta de Ciudadanía y Equilibrio Territorial, Antonia Ledesma, la diputada de Recursos Humanos, Sandra Extremera, el presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Oriental-Axarquía, Jorge Martín, el técnico de proyectos en el área de Bioeconomía de la Fundación Cesefor, Eduardo de Simón, y el secretario general de COAG Málaga, Antonio Rodríguez, además de alcaldes, alcaldesas y representantes de municipios, de empresas y de entidades locales y técnicos de las áreas de Empleo, de Medio Ambiente y de Recursos Europeos de la Diputación.
El informe ‘BioAction Social Málaga‘, encargado a la Fundación Cesefor, identifica cadenas de valor prometedoras que permiten analizar el potencial de productos, subproductos y biorresiduos agroganaderos, forestales e industriales y el impacto económico en las comarcas.
En este encuentro comarcal se han planteado interesantes iniciativas para la explotación de la lana como fertilizante y de los subproductos del olivar y de los restos de la poda de los frutales tropicales como alimento para el ganado. Asimismo, se ha abogado por una flexibilización de la normativa de la Ley de Residuos del alpechín y de la lana para que se compatibilice la sostenibilidad con el aprovechamiento y se ha abogado por recuperar los oficios tradicionales del campo y por la formación que propicie un relevo generacional en las labores agroganaderas.
En el último trimestre de este año se creará una hoja de ruta, a partir de las conclusiones de este encuentro, que pormenorice estrategias y la planificación de inversiones para que las oportunidades detectadas generen nuevas economías y riqueza en la Axarquía.
Presentado el pasado mes de febrero, el estudio ‘BioAction Social Málaga’ es una iniciativa de la Delegación de Innovación Social y Despoblamiento de la Diputación elaborada por la Fundación Cesefor, una entidad sin ánimo de lucro castellano-leonesa que llevan más de 20 años trabajando en el desarrollo integral del sector forestal promoviendo la sostenibilidad, la innovación y la investigación en todas las áreas productivas, apostando por la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad.
El informe se puede consultar en la web (https://sites.google.com/cesefor.com/bioaction-social-mlaga/inicio) de La Noria. Incluye desde un censo provincial de empresas vinculadas al ámbito de la bioeconomía circular, hasta un análisis de las oportunidades que este sector brinda al sector primario malagueño.
Oportunidades con futuro
Entre los temas que se han puesto sobre la mesa en los cuatro encuentros comarcales que se han celebrado, destacan el potencial del sector forestal en el aprovechamiento de la madera, que requiere de profesionales formados que atiendan la creciente demanda de construcciones ecosostenibles, y potencie el cambio hacia un modelo más limpio y descarbonizante que los materiales actuales como son el cemento, el ladrillo y el hormigón; además de la propuesta de sustitución del caucho por corcho en instalaciones deportivas o la utilización de biomasa para la producción de pellets y astillas. En concreto, el corcho es una materia prima se exportan en bruto, ya que no existen empresas de transformación en la provincia.
Otras utilidades con proyección son las aplicaciones de la madera en la industria de la bioconstrucción, entre otros, para la fabricación de chiringuitos y pérgolas; el desarrollo de actividades como la apicultura en entorno a la DOP de la miel, a la que la Junta de Andalucía ha concedido la protección nacional transitoria a este producto que a día de hoy certifica ocho tipos diferentes bajo la marca Miel de Málaga, y cada vez está más cerca de reconocerse en Europa como denominación de origen.
Por otra parte, se plantea el fomento de la ganadería caprina de la DOP de los quesos autóctonos de Málaga que, hoy por hoy, carece de un sistema de protección legal que impulse al sector quesero malagueño en la búsqueda de un distintivo de calidad que promueva la innovación y el valor añadido en sus productos. También destaca otras aplicaciones sostenibles, como la elaboración de derivados lácteos ecológicos o el uso de los animales para la limpieza y el desbroce de los montes.