En las playas se abrirán los lavapiés, pero no las duchas, y estará permitido el riego de jardines y zonas verdes.
El Ayuntamiento de Algarrobo se ha convertido en el primero del litoral de la Axarquía en dictar un nuevo bando con medidas urgentes de cara al próximo verano “ante la situación excepcional de sequía”. Así, la alcaldesa de la localidad, Natacha Rivas, ha dictado que sólo se autorizará el llenado completo de piscinas de nueva construcción o rehabilitadas, mientras que en las playas se abrirán únicamente los lavapiés, pero no las duchas, y estará permitido el riego de jardines y zonas verdes. Son algunos de los aspectos más destacados del último bando municipal, que permanecerá vigente de forma indefinida “hasta que se dicte uno nuevo que lo anule o se declare el fin de la situación de sequía”.
Así, el Ayuntamiento de Algarrobo permitirá el uso de agua para el “riego de jardines, huertos, parques o zonas verdes, tanto públicas como privadas”. De igual forma, para el “baldeo de calles, aceras, fachadas o de cualquier otra superficie, tanto pública como privada, siempre que se realice con agua no potable”. También, estará permitido para “fuentes ornamentales que tengan circuito cerrado de agua y surtidores públicos”.
Por otro lado, se permitirá “el uso de los recursos hídricos de lavapiés”, mientras que para las piscinas se autorizará “el rellenado parcial de públicas y privadas que dispongan de un sistema de recirculación del agua en las cantidades indispensables para reponer las pérdidas por evaporación, limpieza de filtros y para garantizar la calidad sanitaria”.
En el bando de Rivas también se especifica que estará permitido el “primer llenado de piscinas públicas y privadas de nueva construcción o el llenado que responda a obras de rehabilitación o de modificación del vaso”. Respecto a las duchas fuera de las playas, se podrán usar “en establecimientos deportivos y piscinas donde su uso sea obligatorio para su utilización”.
De cualquier forma, el Ayuntamiento de Algarrobo ha solicitado “a todos los ciudadanos, así como a los responsables de instalaciones, tanto públicas como privadas, que hagan un uso responsable, solidario y eficiente del agua potable, revisando posibles fugas y aplicando otras medidas que eviten el consumo de innecesario”. Igualmente, que se revisen “posibles fugas y se apliquen otras medidas que eviten un consumo también innecesario, como cerrar la llave principal de suministro en viviendas e instalaciones en horarios o periodos en que no estén ocupadas, casos de colegios, edificios municipales, negocios o residencias particulares”, entre otras.
Natacha Rivas apunta en el bando que “el seguimiento y la evaluación de las medidas será continuo, pudiéndose tomar medidas más restrictivas en función de la situación de la sequía”. Además, el mismo, que modifica los anteriores dictados en igual sentido, entra en vigor tras ser publicado en el tablón de anuncios municipal “y tendrá una duración indefinida hasta que se dicte un nuevo bando que lo anule o se declare el fin de la situación de sequía”.
