Le conceden la exoneración total del pasivo insatisfecho por situación de vulnerabilidad.
Un empresario autónomo de Vélez-Málaga ha conseguido quedar liberado de una deuda superior a los 145.000 euros tras acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad. El afectado, que había regentado una agencia de viajes durante varios años, se vio obligado a cerrar su negocio en 2019 debido a la transformación digital del sector, la competencia de las plataformas online y la imposibilidad de remontar la actividad, avanza Ángel Recio en El Español de Málaga.
Desde entonces, ha vivido con ingresos muy limitados, recurriendo a trabajos esporádicos, subsidios públicos y al Ingreso Mínimo Vital. Ante la falta de bienes y de capacidad económica para hacer frente a las obligaciones pendientes, se presentó una solicitud de concurso sin masa ante el Juzgado de lo Mercantil nº 3 de Málaga.
La tramitación del caso fue dirigida por Eugenio Luque, director de la firma especializada Koncursal, que acreditó de forma detallada la buena fe del deudor, la ausencia de antecedentes penales o sanciones administrativas, y su voluntad de regularizar la situación conforme a la normativa vigente.